Está claro que lo que no tienen no puede fallar.
Y por supuesto que al tener más tecnología pueden llegar a tener más fallos, lo mismo en los coches.
La durabilidad… pues cuando yo era joven, un SEAT 850 o cualquiera de esa época, era raro que llegarían a los 100.000 km. Ahora cualquiera te pasa...